Las cartas sobre la mesa. Ya os aviso que la hermana mayor de esta de Val d’Aran by UTMB, la de Chamonix, no es que sea mi carrera favorita, pero para nada tengo una animadversión hacia ella mayor que en otras carreras que me han dado el palo; es más, me pareció un auténtico carrerón, más allá de si estoy más o menos cercano a su filosofía.
En Chamonix encontré lo que esperaba e, incluso, me quedé gratamente sorprendido por el nivel organizativo desde que llegas hasta que te vas y el ambientazo que se respira. Para nada soy un ‘hater’ de ella; es más, recomendaría mucho vivirla al menos una vez. Sigue leyendo