Este 2018 finaliza con sabor agridulce en cuanto a las carreras populares. Y es que este año, justo cuando cumple 20, se disputará la última edición de una Sant Silvestre de Sant Cugat a la que no le salen los números (en eso han sido muy sinceros, algo difícil de ver en este mundillo) y que por eso ya no se celebrará más en la ciudad vallesenca.
Será el adiós (¿definitivo? Ummm, es probable el año que viene la veamos en otra ciudad… quién sabe) de la Sant Silvestre original de Barcelona que desde hace años no se celebra en Barcelona sino a 20 km de la capital. Cuenta la leyenda que un desencuentro, años ha, entre el organizador y el ayuntamiento acabó con la longeva Sant Silvestre Barcelonesa – Sant Cugat (ya el nombre, cambiado este año, lo decía todo) protagonizando una segunda luna de miel mudándose al Vallès Occidental y que su hueco lo ocupase la archifamosa Cursa dels Nassos.
En Sant Cugat, la original, ha mantenido a algunos fieles de la capital y además acaparaba a toda esa gente de comarques que la tienen a tiro de coche y no tienen ganas de liarse con el tráfico de la gran urbe y que además disfrute con un recorrido con gran ambiente por las calles. Pero la realidad es que estos últimos años le costaba acercarse a los 2.000 inscritos y, según cuentan los organizadores, era muy difícil poder llevarla adelante.
Aquí tienes una guía en la que te detallo su circuito, estrategia de carrera, los cajones de salida y aquellas dudas de última hora que siempre acaban apareciendo.