Siempre lo he dicho, a esto de «la batalla de los distritos» del Correbarri le falta un poco de chicha y pique. Así que vamos a acelerar ese proceso con una selección totalmente arbitraria de datos odiosos de tus contrincantes que te hará hervir por dentro lo suficiente como para acabar desenterrando el hacha de guerra. Sí, quiero destapar la caja de truenos.
Pero que nadie se me ofenda (ni se lo tome muy en serio): amo esta puta ciudad y cada uno de sus rincones de forma enfermiza, a pesar de cada día nos expulsa un poco más afuera. Por eso, a modo de cortafuegos, te doy un motivo por distrito para que acabes rendido al encanto sadomasoquista de Barcelona.
Motivos para picarte con…
Ciutat Vella
La misma birra que en el bar de tu barrio pero al triple de precio, paella & sangria, el Born es lo más chic si te lo puedes permitir, italianos en bolas. Esto no es Ciutat Vella, esto es Gandia Shore.
Eixample
Medio sueldo en parkings, el otro en multas. Restaurantes de nombres rutilantes y precio astronómico. Muy bonito, Ildelfons, lo de los cuadraditos, ahora dime en qué calle me encuentro.
Sants – Montjuïc
Un barrio Marina sin playa, lo próximo un barrio Sahara. Paral·lel, el destroza sueños de centenares de corredores, sois culpables. No lo digo yo, lo dice Trias, la zona más fea de Barna es vuestra.
Les Corts
Sede de las torres Mordor y del edificio oye que te regalo un premio Planeta. Dieron cobijo a la familia Urdangarín. Zona azul en todos lados menos Pedralbes… No hay Ferrari para tanto ESADE.
Sarrià – Sant Gervasi
Que sí, que están bien las bravas del Tomás, pero sabes que en tu barrio hay un bar donde las hacen más ricas y sin tanto bombo. Un tramo de la Crta. de les aigues NO LA HACE VUESTRA. Luz de Gas.
Gràcia
Dejarte la espalda en el Verdi con una peli infumable. La peregrinación a la Meca es más sostenible que las Festes de Gràcia. Park Güell de pago. Residir no te hace músico. Ni escritor.
Horta – Guinardó
¿Os habéis dejado alguna cuesta y/o escalera por colocar? Es para un amigo. Entrar en coche o moto es adentrarte en un agujero negro dando vueltas con menos sentido que las de su velódromo.
Nou Barris
Podían inscribirse en el Vallés Occidental y nadie notaría el cambio. El Nus de la Trinitat, la meca del diseño, más cuando te dejas la salud de cada pulmón en retenciones. CARRIL BUS #VAOMEVA.
Sant Andreu
«Voy a Barcelona»… Oye, pues si eso ¿qué tal un referéndum de independencia? Cuando acabéis la Sagrera Familia en vez de estación de trenes habrá una pista de aterrizaje de naves espaciales.
Sant Martí
Edifici HUB, Torre Agbar, Skyline, Fórum. Pl Glòries, Parc del Poble Nou, Torre Mapfre… Como nos la han metido doblada los Nouvel y compañía, eh! El Port Olímpic = Magaluf. Imagínate.
_
Y uno para amar eternamente a…
Ciutat Vella
Orgullo de lucha vecinal frente al turismo del todo vale auspiciado por cuatro caraduras locales que ni viven ahí.
Eixample
Tan cuadriculada que parece y cobija una auténtica torre de Babel de nacionalidades, gustos y diversidades.
Sants – Montjuïc
El espejo de la resistencia del comercio local y asociativo. Y Montjuïc. Porque Montjuïc siempre mola.
Les Corts
El Camp Nou aún no se lo ha engullido. Y un barrio que se llama Mercè y es más bonito que las fiestas de la patrona.
Sarrià – Sant Gervasi
Pocas cuestas más míticas que las de Can Carelleu y el Parc de l’Oreneta para abrirte paso hacía la Carretera de les Aigues.
Gràcia
Tu primera gran borrachera, tu segunda palestina y, posiblemente, tu tercera novia (o primer gatillazo).
Horta – Guinardó
Para tener las mejores vistas de toda Barcelona vete al Turó de la Rovira y me cuentas cuando recuperes la respiración.
Nou Barris
Nou Barris fue, es y será lucha obrera. Los principios no se borran. Es la Almeda de Barcelona.
Sant Andreu
Para qué voy a negarlo: hay momentos que me parece estar en otro pueblo. Y eso mola. Mucho.
Sant Martí
Es el símbolo de la Barcelona que se vuelve abrir al mar, además de tener la rambla más chula del mundo.