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Consejos exprés: Ultra Pirineu 2018

RECORRIDO CONSEJOS EXPRES ULTRA PIRINEU

Después de varios años trasteando la propia competición y de un buen montón de salidas por el maravilloso Cadí-Moixeró (si nos fijamos bien, el paraíso lo tenemos tan cerca…), creo que ya es hora de hacer, con todas las reservas del mundo (que sou un pelele), un Consejos Exprés de la más internacional, mediática y prestigiosa competición de montaña de larga distancia que tenemos en casa, la Ultra Pirineu, que este año celebra su décimo aniversario.

Eso sí, tomárselo como una descripción muy por encima de lo que os vais a encontrar, más que como una lección maestra (lo que siempre digo: yo sé tanto y tan poco como cualquiera se calza unas bambas; un corredor popular más que, sencillamente, se lo pasa pipa plasmando por aquí sus tribulaciones por la montaña). Mucha fuerza y que la montaña sea justa con el sacrificio e ilusión que habéis depositado en la carrera.

Briconsejos

¿Es un trail exigente? A ver… que es una Ultra (y no de las sencillas)

Son casi 7.000 m de desnivel positivo y 110 km. Recuerdo que en el Pas dels Gosolans tenía que ir parando cada pocos metros para bajar pulsaciones. Hay que tomarla con mucha calma y jamás, jamás, excederse con el ritmo: siempre es mejor ir con un punto menos del que podríamos llevar, ese será nuestro seguro de vida para llegar a meta.

Y además te va a caer la noche en la segunda parte de carrera, lo que mentalmente es demoledor.

En definitiva es una carrera que no se gana ese día sino matándote a entrenar y aclimatarte los meses previos. Tengo amigos que se toman la jornada de formalización de inscripción como el primer día para comenzar con el plan de entrenamiento.

En cuanto al nivel técnico: si hablamos de descensos peligrosos o de ascensos de tener que agarrarse a las ramas tengo que decir que he participado en carreras de mayor vértigo.

El inicio del descenso del Niu de l’Àliga sí que hay que extremar la precaución, hay también algún tramo corto de cresteo en las zonas más elevadas, y te encontrarás algún punto conflictivo más de roca que resbala bastante (con lluvia entonces sí que sería un buen peligro), pero realmente no ha sido la carrera en la que haya tenido que demostrar al máximo mi poca destreza.

¿Qué tipo de calzado llevo?


Poco te voy a enseñar a ti... Pero con algo de taco y amortiguación. Que aunque no es el peor terreno que te vas a encontrar en un trail de montaña, sí que tiene varias zonas que unas bambas con agarre y cómodas te van a solucionar la papeleta. Especialmente si llueve y tienes que pisar tramos de roca o corriols tapados y húmedos. Puede que en Empedrats acabes metiendo la pezuña en el torrent, pero ya estamos hablando de los últimos estertores de carrera (unos calcetines en la mochila nunca están de más).

¿Llevo bastones?

Por distancia, desniveles… Aquí son muy útiles. Aunque yo no los he llevado en ninguna de las ediciones que he participado (aunque también te digo que hubo momentos que los eché de mucho menos). Son muchas horas de trayecto y te ayudarán a descargar piernas y no veo ningún tramo excesivamente técnico, de esos que molestan cargar con ellos.

¿Qué tal los avituallamientos?

Estupendos, pero asume que es en semi autosuficiencia. Cumplen con todo lo indicado en la web, no te encontrarás sorpresas. Y ahí para todos. Un consejo: la distancia entre avituallamientos es mejor que la asumas por horas que cubrir que por los km entre uno y otro, para que así no te lleves sorpresas de que ‘nunca llega’ (también porque el GPS engaña bastante).

¿Se permite asistencia externa?

Solo en los puntos habilitados. Yo creo que sí, que vale mucho la pena. No tanto por lo material que te puedan ofrecer tus compañeros, ya que creo que con lo que aporta la organización y la posibilidad de tener a tu disposición una bolsa de la vida en uno de los dos puntos que se permite ya haces de sobra, sino más bien porque te va a venir genial para darte ánimo en los momentos de bajón.

La posibilidad de moverse en coche permite que te puedan ver en varios puntos calientes del circuito aunque… maldigo el pxxx peaje de Cadí (un sablazo).

Algunas cosas a tener en cuenta:

¿Cómo es la señalización?

Excepcional. Cinta para dar y regalar en las zonas más frondosas, balizas en las partes altas, señalizado perfectamente de principio a fin. Ningún momento de duda (aunque también he de reconocer que me conozco bastante bien el camino y eso facilita las cosas). ¿He dicho perfecto? Bueno, el único momento lo tuve en Empedrats, a la hora de cruzar la riera de noche, ya que ahí es más difícil balizar, pero ya te aseguro que no te pierdes.

¿Guardarropas, vestuarios y duchas?

Todo en Bagà, aunque en diferentes emplazamientos. El guardarropas al lado de la zona de meta y las duchas en un pabellón cerca de la zona de recogida del dorsal (toca caminar una subidita mamona).

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Estrategia Ultra Pirineu

Una fórmula (para nada definitiva): divídela en tres

Que algunos compis también me la dividen en cuatro y me parece igualmente plausible (en este caso de Bagà a Bellver lo dividen en dos partes: De Bagà al Niu -que al fin y al cabo marca mucho la carrera-; del Niu a Bellver -que se hace larguísimo-).

 

 

Consejos variados para la Ultra


MATERIAL


EN CARRERA

El recorrido

IMPORTANTE: Puntos kilométricos aproximados, ojo

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1/ Salida y primeros metros

Salida a km 1,5

La plaza de la Porxada es una de las imágenes más icónicas de la Ultra Pirineu. Desde ahí comienza nuestra larguísima y apasionante aventura. Nada más acabar de sonar la de El Último Mohicano se da el pistoletazo de salida y comenzamos a callejear por Bagà en unos primeros metros marcados por esa mezcla de miedo e ilusión desmedida… y las retenciones. Los primeros metros dentro del pueblo son así, de ir etrte trotando y/o caminando para la mayoría de corredores ya que las calles dan para lo que dan. Da igual, quédate con el ambiente, los aplausos de la gente y el recuerdo del amanecer.

A partir de ahí tenemos algo menos de un kilómetro pistero de subida donde la idea es comenzar a frenar ese ímpetu de ir rápido al encontrarnos desbordados de energía mental y física. Piano, piano.

2/ Hasta el rebost

Km 1,5 a 8

Ya estamos liados con los corriols y el primero de ellos ya nos indica que esta subida al Niu tiene mucha miga, desde aquí hay que remontar casi 2.000 metros en poco más de 12 km. El trayecto hasta el primer avituallamiento del Rebost queda marcado por dos corriols de subida duros (el segundo con bastante animación al cruzar la carretera de Coll de Pal) y exigentes conectados con un largo tramo de pista que, sin dejar de picar para arriba, es más suave y llevadero. También por los constantes tapones ya que el grupo aún no se ha estirado del todo. Calma y paciencia, si el tiempo de corte no se os echa encima (muy difícil) es casi una bendición para ir guardando fuerzas para más adelante.

Tras superar estos escollos, solo nos queda un corriol de bajada al Rebost que apenas presenta complicación aunque siempre hay que estar alerta de por dónde se pisa.

3/ Subiendo al niu

Km 8 a 14

La parte más bonita de la subida, alejándonos poco a poco de la zona de sotabosc, es ya de no parar de subir encadenando corriols. Y ya casi al ponernos a crestear nos toca hacer un campo a través con unas vistas espectaculares (a tu izquierda verás amanecer el siempre majestuoso Pedraforca). Pero es duro, muy duro, ya que a su verticalidad hay que sumarle la altura. En el momento que comencemos a crestear nos tocará lidiar con una bajada corta pero con algo de roca en el camino y luego otra subida exigente que ya nos deja a los pies del refugio del Niu de l’Àliga, cuyos últimos 150 metros son puñeteros a más no poder (más que nada porque parecen casi gratuitos).

4/ CARENANDO A PENYES ALTES

Km 14 a 21

Vaya primeros 400 metros! Un descenso estrecho, picado y de terreno quebrado que es de esos de ir a salvar la papeleta más que de ponerse a bajar a tope. Mucho cuidado.

A partir de ahí, una sucesión de subes y bajas que hay que tomárselo con mentalidad de Ultra: no cebarse cuando toque subir, dejarse llevar cuando baje (o sea, guardar al máximo). En las zonas más tapadas puedes encontrar rocas que resbalan lo suyo y recuerdo algún corriol de subida corto pero bastante duro. Como ya dije en la crónica, un tramo trampa total ya que esperas ponerte a correr tras los 14 km de subidón anteriores y al final es tramo muy rompepiernas.

5/ BAJANDO A SERRAT

Km 21 a 28

El terreno se dulcifica y sí que comenzamos a bajar más buscando el avituallamiento del Serrat de les Esposes, aunque aún guarda algunas sorpresas. Tramos de pista y corriols que van picando para abajo pero que de vez en cuando te meten un repechoncito mamón. Lo más exigente justo al final: unos 600 metros de subida realmente exigentes para que te abra el estómago y te entre mejor los sandwichs del avituallamiento.

6/ BAJANDO A BOR

Km 28 a 36

… Aunque nada más dejar atrás el avituallamiento la primera imagen que te aparece es la de un rampón de los buenos. Cierto, el primer kilómetro (o kilómetro y medio) sigue picando para arriba en un tramo de subes y bajas que te debes tomar con calma y casi como terreno para asimilar lo ingerido en el avituallamiento. Pero luego ya todo lo que te queda para salir del Cadí y pisar las primeras poblaciones de la Cerdanya es en bajada pistera rápida para dejarse llevar y un corriol donde , aquí sí, toca estar al loro de por donde se pisa en alguno de sus sectores (los más húmedos, que resbalan un poco). Al final la pendiente se va atemperando y ya iremos a lo que nos den las piernas aunque tampoco es cuestión de forzar el ritmo.

7/ HASTA BELLVER

Km 36 a 40

Sucesión de caminos que combinan tramos asfaltados y otros más pisteros y donde debemos hacer un click mental: desde Bor a Bellver se acabó la bajada y toca lidiar con unos kilómetros rápidos y suavemente sinuosos en un tramo que se hace, para mí y para la mayoría, demasiado largo y cansino. Es de esas zonas donde la estrategia más correcta es la de bajar el ritmo y recobrar sensaciones para llegar a Bellver con muchas ganas de seguir a delante.

8/ De VUELTA AL CADí

Km 40 a 44

Tras aprovisionarnos y descansara todo lo necesario en Bellver (recuerda que, si quieres, puedes dejar aquí la bolsa de vida), toca ponerse de nuevo en marcha en dirección al Cadí y este tramo de aproximación es de los que dan auténtico palo (poco vistoso y con la sensación de kilómetros basura) aunque también te permiten volver a pillarle el punto a la carrera sin hacerlo de una forma abrupta. Pista y corriol muy sencillo y con poco desnivel y algunas imágenes bonitas (Talló tiene mucho encanto) que te permiten ir a trote mientras coges fuerzas apara afrontar las nuevas rampas que nos esperan.

9/ SUBIENDO A CORTALS

Km 44 a 50

Volvemos a afrontar esos corriols de subida boscosos y bastante verticales tan típicos aquí. El primero de ellos no es muy largo (unos 400 metros) pero sirve para tomar la temperatura a nuestras piernas y saber modular el ritmo que nos toca a partir de ahora. Hasta el mirador del Cap del Ras vamos encadenando corriols duros y tramos de sendereo ancho, siempre picando para arriba.

En Cap del Ras podemos decir que se ha acabado el sector más duro de este tramo que nos lleva al avituallamiento de Cortals y disfrutaremos de unos metros pistero muy suaves justo antes de iniciar un tramo corriolero que aparenta de descenso pero que va guardando algunas zonas sinuosas.

10/ HASTA roc del llamp

Km 50 a 53,5

Dejando atrás el avituallamiento y unos primeros metros muy tranquilos, tocará de nuevo arremangarse, apretar los puños en los mangos de los bastones e ir machacándose en una subida dura y constante hasta que se llega a Coll de Pendís (y pensar que a un kilómetro por la otra vertiente es tá el km 100 de carrera… Bueno, mejor que no lo pienses, que te vaya a dar el bajón!).

Desde allí, aún siempre picando para arriba, nos encontraremos un perfil más sinuoso, con tramos corribles (incluso algo de bajada muy disfrutable) y otros bastante más exigentes. Ah, es el inicio de una de las zonas más espectaculares y bonitas de la carrera (y aún con la luz del día!).

11/ HASTA prats d’aguiló

Km 53,5 a 61

Toca crestear e, incluso, grimpar,. No mucho, cierto, pero sí lo suficiente como para que pase factura si vas justo de fuerzas.

Cuando aparezcan tramos de roca, no queda otra que mentalizarse en perder tiempo y sortearlo con toda la tranquilidad del mundo. Las grimpadas son muy puntuales y poco técnicas.

Luego al desviarnos rodeando la Comabona por la vertiente de la Cerdanya (solo los de la Maratón la disfrutarán en toda su esplendor) iremos sorteando un corriol con tramos de bajada con terreno con bastante piedra salpicado de varios repechos duros, de esos que divisas el final a ojo pero parece que no lleguen nunca a pesar de estar a pocos cientos de metros.

12/ pas de gosolans

Km 61 a 63

Uno de los momentos cumbre de la Ultra Pirineu. Si te pilla cayendo la noche lo más probable es que en el avituallamiento de Prat d’Aguiló los organizadores te obliguen a que te pongas la chaqueta.

Se tratan de unos dos kilómetros a lo km vertical con un desnivel que en algunos puntos roza la tortura (remontamos casi 500 metros, ojo) y al que hay que sumarle que estamos a más de 2.000 metros de desnivel. Eso sí, es espectacular, tanto de noche (viendo el reguero de frontales haciendo zigzag por la montaña) como de día (vistas impresionantes). Mucha calma, paso a a paso, y parando todo lo que haga falta antes de llegar a la agonía. ¿Escuchas ese becerro sonar? Pues ahí está la cima.

13/ bajando a GÓSOL

Km 63 a 74

Si has coronado el Pas dels Gosolans de día sinque te atrape la noche, tu regalo va a ser presenciar el Pedraforca en todo su esplendor en pleno crepúsculo (de lagrimita y foto instagramera, palabra); si has llegado de noche, fliparás con el paisaje casi espacial y la presencia de una luna que parece que se va a comer la montaña.

Los dos primeros kilómetros transcurren en una meseta y parce que estés en otro planeta, es un perfil sinuoso pero nada agobiante, de esos de dejar pasar los metros sin forzar la marcha.

Luego ya comenzamos el descenso con cara y ojos por un pista corrible pero terreno con bastante piedra suelta que yo te recomiendo que te lo tomes con mentalidad de recuperar sensaciones y llegar a Gósol en plenitud de ánimos (así eliminarás de un plumazo cualquier pensamiento de abandono que te pueda surgir por el cansancio acumulado). También es importante no meterse en el fregado de poner se a recuperar tiempo y bajar a tumba abierta porque los últimos 5/6 kilómetros el desnivel queda en muy poca cosa y nos tocará lidiar con tramos de pista y de corriol más sinuosos de lo que pintan en el perfil de carrera. Este último tramo antes de llegar al pueblo del Berguedà se te puede hacer muuuy largo. Ah, bajando veréis a la izquierda las luces de una población que os puede llevar a equívoco: eso es Saldes, Gósol queda bastante más lejos (que luego llegan los chascos… lo viví en primera persona).

14/ A Estasen

Km 74 a 82

La reentré tras el segundo de los grandes avituallamientos de carrera (el primero es el de Bellver) es suave como la vaselina: encadenaremos corriols y camnos de poca pediente (aunque casi siempre picando para arriba y con algún repecho mamón pero no odioso) que va genial para ir recuperando sensaciones, volver a tomar la temperatura a la carrera, hacer examen de daños, pillar confianza y hacer los suficientes km dulces como para que ya no des marcha atrás. Así será durante más de 6 kilómetros.

… Pero después… Buff, después nos toca un tramo muy puñetero ya buscando el avituallamiento de Estasen por un corriol lleno de repechos durísimos y que parece que no se acabe nunca. Consejo: NO LE HAGAS CASO al cartel que te indica que el refugio está a solo 500 metros porque realmente está al doble (o más). Aquí sí, mucha tranquilidad y nada de sobreesfuerzos.

15/ BAJANDO A GRESOLET

Km 82 a 86

Uno de los descensos más complicados de la carrera, no tanto por el desnivel (que tampoco es excesivo: no es de cogerse a las ramas) si no porque el terreno que pisas es realmente traicionero. Muy resbaladizo y quebrado, si encima te toca afrontarlo de noche se le añade un punto de peligrosidad, especialmente a parti del Mirador del Gresolet. Se trata de salir enteros aquí, así que si te sientes más seguro haciéndolo caminando, adelante.

Ah, ojo a los dos repechitos finales, de esos que no esperas y te dejan seco (suerte que el avituallamiento lo tienes ya a la vista).

16/ SUBIENDO al COLL DE BAUMA

Km 86 a 88

Dos kilómetros duros duros, en los que los bastones se convierten en tu mejor aliado para evitar que se te imanten los pies al suelo.

El terreno es bastante practicable a pesar de sortear algunas rocas, lo que le da ese plus de exigencia está en el desnivel (agradecerás mucho el poco falso llano que aparece en momentos muy puntuales). Se tarda una eternidad en completarlo pero es mejor que sea así: siempre controlando pulsaciones y buscando las mejores sensaciones.

17/ HASTA VENTS DEL CADí

Km 88 a 96

Otro de esos sectores que se podría a hacer a tope pero que estratégicamente te sale más a cuenta tomarlos como lugares ideales para recuperar sensaciones antes de afrontar otros huesos.

Vamos encadenando zonas pisteras (la mayoría con perfil entre la suave bajada y el falso llano, aunque los últimos metros antes de llegar a Vents son de repecho semi durillo) y corriols en bajada con algún pequeño repunte que solo tienen la dificultad de que los afrontamos de noche y algún sector corto con algo de roca.

18/ EMPEDRATS

Km 96 a 100

Bagà tan cerca… y a nosotros que nos meten a lidiar con este pedazo de monstruo. Pero míralo desde esta perspectiva: Si llegas Sant Jordi (o sea, en 4 kilómetros desde Vents), la Ultra Pirineu es tuya. ¿Tienes dudas? sal a hacer los primeros metros, que son suaves y te dejaran en un punto de no retorno.

Luego, sí, se complica y mucho. Primero porque nos toca cruzar la riera del torrent de la Font del Faig en varias ocasiones: frontal a tope, calcular bien el paso a dar y a qué roca toca agarrarse y estar muy al loro de las marcas. Luego porque es una subida de bastante desnivel en el que agradeces mucho los pcoos tramos de descanso que hay desperdigados. Y a todo eso… Que llevamos casi 100 km en las piernas y vamos casi con la reserva.

Pero ya te digo que si salvas el paso por la riera, el resto de la subida es de ponerse un paso firme y cómodo e ir replicándolo.

19/ El último escollo

Km 100 a 102

Diez kilómetros a meta y nueve de ellos más o menos en bajada. Yo , tú y el vecino compra con los ojos cerrados un cierre de Ultra así. Por lo tanto, no es cuestión de llorar el que aún nos quede un kilómetro mamón de subida que sortear, que encima es bastante feo y no aporta nada (se podría subir por pista perfectamente).

Se llega a él tras un corto tramo de bajada fácil corriolera desde el mini avituallamiento de Sant Jordi (consejo: no te entretengas más de lo necesario en él para que no entre el frío), y es un corriol guarro con bastante vegetación que hay que tomárselo con mucha calma. Para lo que queda, ya no nos viene de rebañar segundos al crono, ¿a que no?

20/ BAJANDO A META

Km 102 a 110

Ahora sí que sí. la Ultra Pirineu es tuya… pero el camino hasta meta, aunque se fácil, es más largo que un día sin pan.

Hasta la carretera de Coll de Pal tendremos que descender por una pista en bastante buen estado y que el único peligro reside en un tramo salpicado de mini canales por donde pasa el agua y que con una mala pisada te puede ocasionar una buena torcedura (así que ve con ojo).

La carretera no tiene ningún misterio: te sitúas en un lateral y te dejas llevar por su agradable pendiente de bajada.

Luego iniciamos un corriol sinuoso pero nada complicado cqeu nos conecta con el Camping y la carretera de Gisclareny…

… Y ya allí a disfrutar de la entrada a Bagà (y su puñetero repecho) y bajar por las míticas escaleras que te dejan en el arco de meta. Sufrida y luchada, pero ya es tuya. Enhorabuena!!!

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Por si te interesa…

Así la viví el año pasado.

Y algo de información general

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