De vistas impresionantes, de recorrido sinuoso, de combinar sabiamente ciudad y campo, de saber sacar jugo al entorno y de ofrecer unos servicios de calidad. De todo esto va sobrada la Mitja de la Garrotxa, una media maratón ideal para aquéllos que dan tanta importancia a competir como a disfrutar del recorrido. Y sí, también es esa curiosa carrera que regala jamón a los finisher pero que cuando la catéis (la prueba, no el jamón) os daréis cuenta que es mucho más que la Mitja del pernil. 

• Lugar: Olot (La Garrotxa).
• Fecha: 26 de marzo (10 h).
• Precio: 22 € (21k) y 11 € (10k).
• Participación: 726 corredores (503 en la Mitja y 223 en el 10k).
• Organizador: Club Natació Olot.
• Tipo: Asfalto.
• Distancia: 21,097 km y 10 km (homologados).
• Servicios: Guardarropa. Masajes. Duchas. Vestuarios. Cuatro avituallamientos líquidos durante la carrera (agua) y en meta (agua, refresco, dulces y fruta).
• Obsequio: Paleta de jamón (21k) o embutidos (10k) al cruzar meta.
• Circuito: De perfil tremendament rompepiernas con una primera mitad que va picando para arriba y una segunda más favorable pero que aún guarda algunos repechos. 50% dentro de la ciudad (incluyendo un bonito paso por el casco antiguo) y el resto recorriendo la zona volcánica de la Vall d’en Bas (gracias a Quel Costa por la precisión que yo no he tenido). En el caso del 10k, enteramente urbano.

*Que apoquinas con tu inscripción.

Resultados Mitja de la Garrotxa

Fotos Mitja de la Garrotxa

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Cosas que están bien

Vaya gozada de recorrido

Perfil de los que me gustan (rompepiernas, lleno de sorpresas y que no te permite desconectar ni un segundo) para un circuito que empieza un poco mustio (esos primeros dos kilómetros no son su mejor carta de presentación) pero que luego, pisando el centro y ya llegando a la Vall d’en Bas, te deja unas postales para enmarcar. Es un circuito duro y mental, de largas rectas y momentos de soledad (aunque tengo que reconocer que en mi caso lo de la soledad del corredor de fondo tampoco ha sido para tanto ya que siempre tenía por detrás o por delante a alguien a unos 20-30 metros), y que merece mucho la pena porque está trazado de tal manera que, además de disfrutar de sus paisajes (añadir el fabuloso paso por el casco antiguo en los últimos km), te permite llegar volando hasta meta (tres últimos km de infarto). Me ha encantado.

Organización

De notable. Lo dicho, no es lo mismo gestionar una prueba de 700 corredores que una de 7.000 pero eso no es menoscabo para valorar muy positivamente una organización que destaca tanto en los rasgos mayores como en los detalles.

Recogida del dorsal el mismo día sin problemas (a destacar que hubiera varios plafones con los listados de dorsales para no colapsar); guardarropas ordenado, carrera bien señalizada; puntos kilométricos visibles y carteles informando del lado de la carretera por donde discurrir (durante varios km coincidíamos los corrredores en uno y otro sentido de la marcha); cuatro avituallamientos bien servidos (muy inteligente el aprovechar el propio trazado del circuito para en tan solo dos ubicaciones poder ofrecer cuatro veces agua); y control del tráfico excelente durante dos tercios de la prueba… y más discutible en los kilómetros finales (de eso hablaré más tarde).

Servicios de calidad

Que gusto da poder ducharse en unas instalaciones espaciosas, limpias y con agua caliente. Aún más poder tirarse al césped y disfrutar del avituallamiento final mientras se van repartiendo los premios de la prueba. O tener también un buen montón de fisios, que te dejen hacer servir los lavabos del propio centro deportivo (ya os digo que esto no sucede siempre en las de Barcelona), o tener colgadas de inmediato las clasificaciones.

Y sí, un jamón

Que para eso se le conoce como la Mitja del pernil (que para algunos no vale ni para regalar y para otros es más que decente; yo aún no lo he catado). Un curioso obsequio que la diferencia de la típica camiseta u prenda vinculada a las carreras populares y estrecha lazos con el entorno que acoge la prueba. Por cierto, muy cachondo la iniciativa de la organización de hacerte una foto final con el jamón en brazos y cara de he llegado tan destrozado que me lo voy a zampar de un bocado.

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Cosas a mejorar

Más control de tráfico en los últimos km

Ya con la ciudad despierta te encontrabas en algunas calles a conductores circulando por las avenidas por donde discurríamos los corredores sin que hubiese ningún responsable controlando el tráfico (eran momentos puntuales porque luego veías un buen montón de voluntarios en cruces importantes) pero, por poner un ejemplo, eché de menos a alguien controlando la entrada y salida de autos en el parking de la rotonda de meta. No sé si es lo habitual en las carreras de por aquí (quizá sí y estoy pecando de pitxapins, pero incluso en las del Bages no me había encontrado una situación similar) pero me ha chocado bastante tener en algún momento que ponerme a un lado para que pudiesen pasar.

Eso por una parte, por otra quiero destacar el absoluto respeto de los conductores con los corredores a lo largo de la prueba, tanto en los momentos que el control del tráfico era más intenso (los primeros dos tercios del recorrido) como en la situación descrita en los kilómetros finales.  Es una de las diferencias de vivir en la metrópoli o en una capital de comarca alejada del jaleo: qué gustazo ver a conductores que, en lugar de pitar y quejarse, respetan la decisión y bajan del coche a animar a los corredores.

¿Es un precio caro?

Había escuchado alguna queja sobre el precio de la Mitja (22 €) y, claro, a mí me sorprende porque para los que participamos en las de Barcelona y alrededores se nos queda como un precio en la media., pero entiendo que para los que son de Girona (donde hay 21k a un precio muy barato y con bastante buen boca oreja como son la Mitja de Banyoles o la de Puigcerdà) que les resulte excesivo. Así que según de donde seas te parecerá más o menos caro: yo los he pagado a gusto y creo que han sido 22 € muy bien invertidos.

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Preguntas populares 

Soy un principiante ¿es una carrera apta para mi?

El 10k sí que lo veo, a la Mitja hay que llegar con algunas lecciones aprendidas. La primera de ellas el saber correr asumiendo que a ratos vamos a estar prácticamente solos, saber gestionar los diferentes desniveles que se van presentando, regular el ritmo según como sople el viento… Lo ideal si llevas poco en este mundillo: comienza con el 10k que también es chulo y al año siguiente da el salto a la Mitja.

¿Puedo hacer marca?

Lo veo muy difícil. El perfil no es para nada suave, no hay repechos exigentes pero es de esos recorridos que nunca acabas por clavar cada km al mismo ritmo. Tanto sube y bajas acaba agotando, especialmente si en la primera parte no guardas todo lo necesario, y en la Vall d’en Bas el viento suele hacer acto de presencia y, en ocasiones, ser algo molesto. Es una carrera de mucho coco, más piernas, y saber gestionar muy bien las energías.

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RELACIÓN CALIDAD/PRECIO: 8
MI NOTA*: 8,5

*POR SUPUESTO, SUBJETIVA A MÁS NO PODER Y VARIANDO SEGÚN LA OPINIÓN DE TODOS VOSOTROS.

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Fotos Mitja de la Garrotxa

Fotos de CN Olot

Fotos de Soren Asier