Si te cruzas con un pelotón de camiones aparcados en un restaurante de carretera sabes al instante que ahí dan bien de comer. Algo parecido ocurre con las carreras de montaña: si ves que los Koala’s, los Punk Trailers y el sector femenino de los Red Runners la tienen apuntada en su agenda o no paran de hablar de ella es que ahí te vas a meter un buen atracón de la mejor montaña. Apuntad el nombre, La Neorural, esto no es un Bulli de mierda, aquí se sirve el mejor entrecot con su buen chorro de tabasco.

– Lugar: Santa Maria de Martorelles (Vallès Oriental).

– Fecha: 30 de noviembre (8.30).

– Participación: 350 apuntados (cerca de 300 el día de la carrera desafiando la amenaza de lluvia).

– Tipo: Trail.

– Precio: De 23 a 30 euros.

– Distancia: 27 km (1.600 m de desnivel positivo).

– Obsequio: Manguitos y una opípara bolsa del corredor.

– Servicios: Duchas, guardarropas, fisios, cinco avituallamientos líquidos en carrera (dos de ellos también sólidos: chocolate, frutos secos y fruta, además de coca-cola, isotónica, agua, voll-damm), y líquido y sólido tras cruzar la meta (con el añadido de caldo y bocadillo de butifarra).

– Circuito: Muy exigente, en constante sube y baja con varios muros y algunos repechos pisteros que te obligan a caminar. Bajadas técnicas, y firme mejor de lo previsto a pesar de las lluvias de los últimos días.

– Resultados: Aquí.

*Que apoquinas con tu inscripción

FOTOS DE LA NEORURAL 2014

COSAS QUE ESTÁN BIEN

– El circuito es una gozada. Siguiendo con la metáfora culinaria, los que he mencionado antes tienen una particularidad que debes tener muy en cuenta: les encanta el picante, ellos gozan con todas las guindillas que hay diseminadas a lo largo del circuito en forma de muros de eso de agarrarte a las ramas, asirte a las piedras, hincar las uñas en la tierra y tirar de los cuatro mechones que le quedan en la cabellera al pobre que va delante de ti para no irte abajo. Es un circuito con mucha miga.

Ahora… suelto la bomba (y no pretendo que suene a sobrada): sí, es dura, jodidamente dura, pero  me la habían vendido taaaaaaaaaaaan terrorífica (tanto como para pesadillear con ella un par de noches antes) que al final no me lo ha parecido tanto en el sentido de que esperaba casi más una caminata sufridísima (porque no habría más alternativa que esa, caminar, parar, hincar la rodilla) que un trail de altos y bajos. Y lo cierto es que… se deja correr (y yo lo celebro, me lo he pasado bomba), eso sí, después de haberte metido un buen rapapolvo en la infinidad de tachuelas que la salpican, esos pocos tramos de pista que esconden pendientes martirizantes y algunos falsos llanos que te escupen sonrojantes mentiras en la misma cara. Se baja rápido y con cierta seguridad, gracias también a que los pocos tramos realmente peligrosos estaban perfectamente señalizados (algo que da mucha tranquilidad).

A ratos me ha recordado a Catllaràs (la frondosidad del bosque te transportaba al Cadí de golpe), en otros momentos a las Punk Trail (esas subidas casi imposibles), y en contadas ocasiones a la Vigia Trail o Endimoniada (la llegada a la torre, las vistas del área metropolitana). Todo, por supuesto, bueno (hasta nos ha respetado la lluvia y el terreno ha absorbido perfectamente las precipitaciones de los últimos días). Uno de los circuitos con entidad propia que más he disfrutado de principio a fin en mi vida. Palabra.

– Una organización que está a las duras y a las maduras. Lo normal es que la gestión de una carrera salga bien siempre que todo esté a tu favor, si se hace mal es que los que están detrás son unos inútiles (o unos vividores, o ambos) y mejor que se dediquen a otra cosa. Pero cuando te encuentras inmerso en un contexto de adversidades (esa previsión de temporal que parecía que se iba a engullir el mundo) y todo ralla a un nivel formidable solo queda quitarse el sombrero: están hechos de otra pasta.

Un parking habilitado muy bien administrado, reparto de dorsal eficiente (única pega: algún listado más en orden alfabético), guardarropa con un servicio también estupendo, señalización de carrera perfecta (desde aquí tengo que agradecer que se matasen a poner cintas en estos días de lluvia intensa, eso es amor por lo que hacen), hasta cinco avituallamientos en carrera perfectamente servidos (solo eché en falta algo de fruta/dulces en alguno de los primeros), servicio de fisios, avituallamiento de meta copioso y entrega total de los voluntarios. Aunque de esto último prefiero remarcarlo aparte acto seguido.

– Voluntarios y vecinos.  Uno de los motivos por los que me alegro mucho de que al final la meteorología haya sido clemente, más allá de que el que escribe haya salvado un poco el pellejo, es por el hecho de que la total entrega de los voluntarios y los vecinos no se merecía que fuese pagado con un chaparrón. Tanto en el pavellón como a lo largo del recorrido sin parar de animar, cumpliendo de sobras con las tareas encomendadas y contagiándote de esas ganas que se le pone a algo cuando se siente propia. Y aunque es mi primera vez  por aquí, creo que La Neorural, ha calado hondo en el pueblo.

Levantarse sabiendo que te puede caer la de San Quintín tiene un mérito que no se paga ni con el mayor de los agradecimientos, pero al menos os dejo estás líneas para que quede constancia.

– Vale lo que cuesta. En un principio se puede llegar a pensar que resulta cara (porque hay alternativas más económicas dentro del área metropolitana, no porque sea realmente cara: más o menos sale a euro el km), pero es aterrizar y que te den una bolsa del corredor realmente completa, que dentro encuentres un obsequio tan útil para estos tiempos de duda entre el frío inminente y la perpetuidad veraniega como son unos fantásticos manguitos, que pises el primer corriol y sepas que te lo vas a pasar en grande en un circuito testeado infinidad de veces para ofrecer lo mejor de la serralada del Litoral, que veas que la organización cumple más que sobradamente, que la ruidosa animación de la subida al castell se oiga hasta en las antípodas, que la botifarra esté sabrosísima y que la Voll-Damm se sirva bien fría… En resumidas cuentas, que te des cuenta que el precio, como en Behobia o como en la Mitja de Granollers, es lo de menos.

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COSAS A MEJORAR

– Aspectos menores:

1) El tapón del principio. Creo que la distancia a la que se llega a él es suficiente (kilómetro largo), así que no retocaría el circuito: es per-fec-to. Quizá sí que avisaría antes de partir por megafonía  de que en breve hay un corriol y que sale más a cuenta que desde un principio cada uno se coloque donde más o menos vea su nivel.

2) Ducha con agua fría: Que sí, que me mola el rollo pedreste, pero yo ya he encontrado mi límite mucho antes que el vendedor de Bentleys: el agua, caliente, y ellas, depiladas.

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PREGUNTAS POPULARES / RESPUESTAS IMPOPULARES

Soy un principiante ¿es una prueba apta para mi?

Ni por asomo. Esto es un trail de nivel ‘Catalunya central cap amunt’: desnivel fortísimo, mayoría absoluta y aplastante de traileras respecto a pista, rampas con pendientes muy duras, bajadas técnicas… Sí, seguro que algún día la podrás correr, pero mejor que sea con la garantía de que el sufrimiento es voluntario y no una agonía por querer ir dos pasos por delante de tu evolución natural. En zonas montañosas cercanas (Collserola, Marina) tienes algunos trails más sencillos y cortos donde comenzar a labrarte un nombre y conseguir llegar a punto para disfrutar de ésta.

RELACIÓN CALIDAD/PRECIO*: 8

MI NOTA*: 10

*POR SUPUESTO, SUBJETIVA A MÁS NO PODER Y VARIANDO SEGÚN LA OPINIÓN DE TODOS VOSOTROS.

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FOTOS DE LA NEORURAL 2014

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