A examen: Marató de Barcelona 2014

Blogmaldito

hace 10 años

Mi reino por un palacio de hielo. O algo parecido pensamos muchos mientras transitábamos de forma fatigosa por una nueva edición de la Marató de Barcelona, esta vez marcada por un tiempo primaveral que se quiso disfrazar casi de verano para los que llegábamos de ambientes más polares. Una traición que impidió grandes marcas pero consiguió darle a nuestra pequeña aventura ese punto épico que adorna tan bien las historias que durante estas semanas contaremos orgullosos a todo bicho viviente.

AH, SE ABRE LA VEDA DE LAS MINI HISTORIAS DE LA MARATÓ (VAMOS, QUE QUIERO TU CRÓNICA).

– Lugar: Barcelona

– Fecha: 16 de marzo (8:30).

– Precio: de 61 a 84 euros.

– Participación: 17.844 inscritos (llegaron a meta 14.230).

– Tipo: Asfalto.

– Distancia: 42,195 km.

– Servicios: Guardarropa. Masajes. Avituallamiento líquido y sólido en carrera (agua, isotónica, fruta, frutos secos y geles) y en meta.

– Obsequio: Camiseta y medalla*.

– Circuito: Todo lo que necesitas saber del circuito lo tienes aquí.

Resultados: Aquí.

Que apoquinas con tu inscripción.

LINK A LAS FOTOS DE LA MARATÓ DE BARCELONA

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COSAS QUE ESTÁN BIEN

– Organización notable. Es ya sabido pero siempre hay que recalcarlo (sobre todo cuando es en clave positiva), el nivel mostrado en la Marató de Barcelona en cuanto a organización y servicios es casi siempre de quitarse el sombrero. Excelente recogida de dorsal y un guardarropas muy bien ordenado pero en la que se produjo el algunos momentos alguna que otra cola para dejar la bolsa, un montón de carteles informativos, acceso a las barquetas estricto, avituallamientos largos y con muchas manos (un pequeño pero: el segundo en Numància llegaba demasiado de golpe tras acometer un giro y me acaban de comentar que acabó faltando agua en el del 28, el calor causó estragos y se vieron perjudicados los que iban por detrás) y mejorando todavía más en algunos aspectos (he visto más lavabos en carrera, aunque creo que eran insuficientes en la zona de salida, y repartir la vaselina de una forma más efectiva), puntos kilometricos perfectamente ubicados y la novedad de esa ducha en el km 32 que podía haberse repetido un par de veces más adelante (sí, menudo calor). Y para coronarlo un numeroso servicio de masajes a final de carrera.

– El trabajo de los voluntarios. Los que somos de Barcelona no hace falta que nos lo digan, tenemos un colectivo de voluntarios que valen su peso en oro. Y es aquí, en el Marató donde se plasma perfectamente el por qué de ese buen nombre y su gran labor. Atentos, trabajadores y siempre con fuerza para darte ánimos, son de esas cosas que te permiten sentirte orgulloso de tu ciudad. Sin ellos Barcelona no sería ni la mitad de lo genial que es a día de hoy.

– La animación en las calles va a más. Encantado no, encantadísimo de comprobar como en cada edición se suma más gente a animar a los corredores y además en lugares ya no tan comunes como antaño. Ver toda la Ronda Sant Pere con gente aplaudiendo, ese inicio y final de Meridiana, la zona de Sant Andreu donde los vecinos nunca fallan, el giro en Diagonal Mar que es pura épica y un Litoral en el que poco a poco se van aproximando más asistentes para abrigarnos del muro es algo que se agradece un montón. No sabéis cuanto. Gracias. De verdad.

-Expo Sports, más y mejor. Tanto como para tener que trasladarlo a otro pabellón donde poder darle cabida. Como leí por ahí cada vez es más más tri y menos run (seguramente porque el gran nicho de mercado, el negocio gordo a explotar, sea ese), y aun así resulta casi imposible memorizar la cantidad de stands y gama de productos que se ofrece. Eso sí, que nadie espere grandes chollazos en todas las supuestas ofertas: yo me encontré hasta 40 euros de diferencia en el precio de unas bambas de la feria respecto a los de una tienda física… a favor de esta última. Ah, y mucho cuidado con según que tipo de remedios celestiales, dan bastnte yuyu (el remedio y quien te lo ofrece).

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COSAS A MEJORAR

– Lo de siempre, ese precio repercute en la participación. Primero, agradezco que se haya congelado el coste de la inscripción con respecto al año pasado (bueno, nos comemos la subida del IVA, todo hay que decirlo) pero es sintomático que en pleno auge del running la de Barcelona sea de las pocas maratones que cada año va perdiendo participantes mientras algunas de sus principales ¿competidoras? cierran inscripciones con meses de antelación (y un precio más ajustado).

Está claro que la cercanía en el calendario de Valencia, San Sebastián y Sevilla antes, y Roma y París en breve les ha hecho mucho daño (ya llevan dos ediciones queriendo batir los 20.000 y, sin embargo, siguen perdiendo corredores, este año no se alcanzó ni los 18.000 inscritos, un buen montón de ellos por invitación), pero eso no debe ocultar otro factor igualmente importante: el precio de la inscripción, sobre todo, a falta de un par de meses es lo suficientemente caro para que los que tienen dudas de última hora decidan no acabar de dar un paso adelante.

Sí, es cierto, el porcentaje de corredores foráneos (para qué vamos a negarlo, en la mayoría de casos con unos sueldos más europeos que los nuestros) sube, y eso sería muy positivo si el número de corredores total también lo hiciese, pero resulta que pasa justo lo contrario: hay menos participantes, por lo tanto, menos corredores autóctonos. Y eso es preocupante. La Marató se está convirtiendo en un espejo de lo que a veces sucede en la ciudad: un escaparate al mundo en el que apenas salen en la foto sus propios vecinos.

Pero aún cuesta más entender que su hermana pequeña, la Mitja de Barcelona, siga batiendo récords de participación y que de ese trampolín de futuros maratonianos no se acabe aprovechando todo lo que debería la Marató.

– ¿La camiseta como síntoma del negocio del running o de las disputas institucionales? EDIT. De buena calidad (o como mínimo clavada a la del año pasado, que a mí me vale de sobra) y diseño sencillamente…pobre, la camiseta de la Marató 2014 repite el dilema de 2013: O hay un problemón serio con los patrocinadores y estamentos a la hora de discutir la presencia de sus logos en el diseño y se la quisieran ventilar lo más rápido posible, o que, sencillamente, se aprovechasen de su fealdad (que no lo es tanto, es simplemente correcta) como gancho, para mí vergonzoso, para que esa marca pueda vender otras camisetas conmemorativas de la Marató, estas sí, mucho más chulas. Desde Asics me han indicado que ofrecieron un diseño de Finisher parecido al de París pero que el ayuntamiento (que es quien se encarga finalmente de su diseño) es la que ha decidido el que finalmente se ha producido, según me cuentan. En ese caso me como mis palabras con patatas.

Ya no es tanto por lo que te ofrezcan sino por esa sensación de descuidar un detalle (ojo, con otro, el logo del dorsal era de 2013) que para muchos corredores (y no solo los que debutan) significa un recuerdo con el que rememorar una pequeña gesta. Por suerte, la medalla de este año molaba mucho más, tanto que se ha convertido en mi favorita.

– Algunos pequeños detalles. 1) Tener que tragarte toda la Expo Sports y su laberíntico pasilleo sacado de alguna perversa mente con sobredosis de Ikea cuando sólo quieres ir a recoger el dorsal y vas con prisa es un incordio (y encima no puedes recortar, hasta ahí eso está mal visto). 2) El nombre del dorsal intentaría que fuese un poco más grande (te tienes que fijar bastante para leerlo). 3) Llegar a la nueva ubicación del guardarropas tras cruzar la meta es una pequeña odisea, y luego salir de allí para encontrarte en las mismas. Y 4) Aunque es loable que se haya dado un espacio para recoger productos para el Banc dels Aliments, se echó de menos algo más de publicidad y una mejor ubicación. Parecía que estaba colocado casi por molestia.

– ¿Toca cambio de fecha? Asumámoslo: la temperatura alcanzada hoy es difícil que se vuelva a repetir en próximos años, pero la lluvia fina del año pasado es aún menos probable que se produzca. Lo normal es que en estas fechas ya comience a picar el sol y eso repercute en la fatiga del corredor y en que las marcas no sean las que uno cree llevar en las piernas. Quizá toca meditar sobre si sería conveniente volver a esa fecha del calendario donde la meteo era más sensible al corredor: la primera semana de marzo.

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PREGUNTAS POPULARES / RESPUESTAS IMPOPULARES

Soy un principiante ¿es una carrera apta para mi?

Como debut maratoniano, sin duda. El perfil de la carrera no es para nada excesivamente duro (el tramo de subida se concentra, sobre todo, en los primeros km) y el recorrido es bonito y céntrico. Estarás rodeado de un buen montón de debutantes, así que en tu sufrimiento empatizaras con el que tienes al lado. Te dan un margen de seis horas para completarla y la organización en carrera suele estar a la altura, es un modelo a seguir. Y si además eres de Barna y has corrido algunas pruebas populares mucho de los tramos te serán muy conocidos. Sufrirás (porque eso no se puede esquivar) pero te lo pasarás en grande.

¿Puedo hacer marca?

Sí, con algún pero. Es un circuito no excesivamente complicado pero, todo hay que decirlo, no es el más rápido que te vas a encontrar (ahí tienes Valencia y Sevilla como referencias). le penaliza mucho los primeros 7 km de subida y los dos últimos del Paral·lel. Pero aun así, si estás en forma y el calor no aprieta (algo difícil desde que se decidió retrasar su lugar en el calendario un par de semanas de marzo) la posibilidad de conseguir batir tu crono es muy alta. Hoy, claro, no te lo parecerá, pero te aseguro que es posible.

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RELACIÓN CALIDAD/PRECIO: 6,5

MI NOTA*: 8

*POR SUPUESTO, SUBJETIVA A MÁS NO PODER Y VARIANDO SEGÚN LA OPINIÓN DE TODOS VOSOTROS.

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