2ª PARTE: TipoLOGÍA
Dejamos los términos científicos y vamos al grano. Toca discernir a los recortadores según la tribu urbana a la que pertenezcan. Y es que no sólo de curvas anchas viven.
– El que sale un cajón por delante de lo que le tocaría. Una clara secuela de otra de las patologías en el mundo del running: el daltonismo.
– El que enciende su crono 30 segundos después de darse la salida para chulear durante el rato que hay entre que cruza la meta y se cuelgan las clasificaciones de tiempazo con los compañeros.
– El que va en paralelo a los márgenes del recorrido para evitar tener que hacer adelantamientos y tener pista libre. Ahora, malditos los vecinos que se atreven a transitar por su acera.
– El que toma las curvas en un ángulo perfecto para convertirse en una bola de demolición para el resto de corredores.
– El que elige la carrera en función si hace bajada o le faltan «unos metrillos» (léase como «cientos») para completar la distancia publicitada.
– En un circuito a doble vuelta con pruebas de distinta distancia , el/la que se apunta a la larga y como ve que va a petar aprieta y se queda en la mitad de lo pactado como si fuese su idea original.
– El que le pesa la fatiga y está sufriendo más que el corrector del word en manos de Paris Hilton y necesita rascar de dónde sea para llegar a meta y derrumbar su autoestima. Respect, que a veces las cosas no salen como a uno le gustaría.
– El que toma las rotondas por el medio ya que hay que impedir que las plazas conquisten la ciudad.
– El que se salta los puntos de control pero cruza la meta como si hubieran sufrido las mismas penurias que el que llega a su lado. Eso es empatía.
– El que aprovecha un empujoncito del transporte público.
– El/la que sabe que lo mejor llega al final y se apunta a la carrera en los últimos metros.
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Otras entradas:
Joder, has puesto lo peor de cada casa. Vaya gentuza. ¿se puede llegar a ver a especímenes de cada subespecie todos juntos en una misma carrera?. El que enciende el crono más tarde es algo muy pero que muy cutre.
Buenas Gonzalo,
Ok, con tus palabras certifico que me está saliendo demasiado anti… y no lo buscaba. Es más, para mi los recortadores (que levante la mano quien alguna vez no haya pecado) no son esos seres abominables que muchos quieren vender (y parece que también yo…) sino parte de la fauna que sólo molesta cuando le estorban a uno. Free decisions!
Salud!
Amen
Solo un apunte ¿en serio hay personas que ponen su reloj un poco más tarde de la salida para recortar de esa forma?
Si me pinchan no me sacan sangre.
Alucino.
Allá cada cual con lo que se cree de sí mismo pero cuando molestas a los compañeros… feo, muy feo.
Algunos hay, sobre todo en las pruebas que controlan el tiempo ‘a mano’, o sea que el tiempo real al final es el que decides tú…
Ja,ja,ja! Cuanto me ha gustado leerte! A mi se me ocurrió hablar sobre el tema de las trampas en las carreras y me llevan incordiando y poniendo verde aaaaaañññññooossss ( unos 6 y no exagero ) y todavía siguen…
http://corriendoatodocorrer.blogspot.com.es/search/label/trampas%20en%20las%20carreras
Buenas,
La palabra que los define perfectamente la has proporcionado tú: incordio. Mientras no molestan no hay problema, pero como se crucen, te los tengas que esquivar y te trunquen una buena carrera que has preparado con mimo y dedicación puede estallar el satanás que cada uno lleva dentro de si.
Salud y km.